miércoles, 22 de abril de 2015

La Isla de Cártama

Opinión

La isla de Cártama

Salvo Tierra 2015-04-22 10:24:00

Cuando a Noelia Hidalgo se le ocurrió afirmar en el programa ‘Este es mi pueblo’, que la Sierra de Cártama había sido una isla hace tan solo unos pocos milenios, sus paisanos quedaron estupefactos. – A esta chiquilla le ha sentado mal estudiar tanto–, pude oírles decir a una pareja de mayores que viajaban delante mía en el autobús.
La isla de Cártama
RÍO GRANDE, A SU PASO POR CÁRTAMA.
Hace tan sólo unos días la ambientóloga cartameña presentaba un exquisito libro dedicado a la flora de su Sierra. El libro es un magnífico ejemplo de cómo dar a conocer a toda la ciudadanía los valores naturales de un espacio natural. Imágenes cuidadas, descripciones sencillas y los usos que se le han dado en el territorio a las diferentes especies vegetales, logran una obra tan sencilla como interesante.
Entre las especies que se recogen aparece una sabina propia de los sistemas dunares que hoy podemos encontrar en Cabopino y algunos escasos puntos más de nuestro agredido litoral. La aparición de esta reliquia en la sierra cartameña demuestra que Noelia tiene razón y que efectivamente hace poco el mar bañaba su base y que se erigía a modo de peñón en medio de un delta del Guadalhorce cuya amplitud era enorme.
La actividad humana y en especial esos grandes pantanos, tan visitados en estos días, han menguado el caudal de nuestro gran río. Pero el agua siempre busca su cauce y por eso los estudios de inundabilidad del bajo Guadalhorce deben tomarse con la seriedad que se merecen. Estos estudios siempre tienen como horizonte 500 años y la burla es bien sencilla: de aquí a entonces, todos calvos. Pero, estimados urbanistas y regidores,  en el reloj geológico la mitad del milenio empieza mañana, y no hay que desestimar  que, como adelantaba la investigadora Hidalgo, en un futuro cercano viéramos nuevamente la isla de Cártama.